El atractivo turístico de la Mina de La Jayona entremezcla el interés del emplazamiento como elemento del patrimonio industrial más representativo de Extremadura con el de los valores ambientales adquiridos. Está declarada como Monumento Natural mediante el Decreto 115/1997 del 23 de septiembre.
Se trata de una antigua explotación minera para la extracción del mineral de hierro de la localidad de Fuente del Arco, Badajoz, población ubicada al sureste de la provincia pacense e inserta en la comarca de la Campiña Sur, a escasa distancia de la sierra norte de Sevilla. Concretamente, se encuentra a 4,5 km al sur de la población, a 7 kilómetros del casco urbano. La mina se halla en la Sierra de La Jayona, a unos 700 metros de altitud y ocupa una extensión de 80 hectáreas en torno a un paisaje típicamente mediterráneo. El espacio se explotó desde 1900 a 1921, extrayéndose en todo este período un total de 270.000 toneladas de mineral. El decaimiento de la actividad minera parece ser la tónica durante la segunda década del siglo XX y en 1914, con el estallido de la 1ª Guerra Mundial, todo el sector va a verse afectado. En un primer momento, las fábricas funcionaron a pleno rendimiento, llegando a las cotas más altas de la península, pero al término del conflicto la producción se resintió debido a las reservas estratégicas acumuladas durante los años de guerra, desequilibrándose el mercado mundial de los metales y provocando el cierre de establecimientos metalúrgicos y explotaciones mineras. Como consecuencia de las labores mineras quedaron como testimonio los once niveles en los que se suceden andenes, galerías, plataformas y salas, las cuales nos sitúan la magnitud que tuvo la explotación, del mismo modo que lo atestigua el hecho de que se pusieran en funcionamiento en los inicios hasta tres máquinas de vapor con una potencia total de 180 caballos. Se tiene constancia, igualmente, del transporte del mineral mediante un teleférico instalado en la mina en 1905. En la actualidad, la antigua mina se ha transformado en un complejo geológico y en un ecosistema peculiar de primera magnitud. El hueco que actualmente observan los visitantes fue descubierto mediante la labor a pico y pala de los más de cuatrocientos mineros que trabajaron al unísono en la mina, ayudados por cargas de dinamita. El avance se llevó a cabo en profundidad y lateralmente, siguiendo los criaderos de mineral. En total, de la mina quedan pequeñas construcciones y once niveles en los que se suceden los andenes, galerías, plataformas y salas mencionadas. De dichos niveles sólo son visitables en la actualidad los números 2, 3, 4 y 9. De entre los elementos conservados de la mina e incluidos en las visitas guiadas que se organizan para conocer la misma destacan el Barracón de los ingenieros y el Barracón de los mineros, los cuales nos informan acerca de la organización y división del trabajo en las labores de planificación y extracción del mineral durante los años de vigencia de la mina.
Las visitas son guiadas y se conciertan llamando al Ayuntamiento de Fuente del Arco. Invierno: 10.00, 12.00 y 15.30 h. Verano: 10.00, 12.00 y 18.00 h. Lunes cierra por descanso.