Las minas subterráneas se combinan con las explotaciones a cielo abierto como la Corta Allozar y Corta Barrabasa. Éstas y el conjunto del patrimonio minero han definido un paisaje característico.
La cuenca minera de Val de Ariño es una de las tres grandes cuencas de minas de lignito localizadas en la provincia de Teruel junto a las de Utrillas Escucha y Gargallo Estercuel. Se sitúa en el flanco meridional de la Sierra de Arcos, en la actual comarca de Andorra Sierra de Arcos. La tradicional dedicación agrícola y ganadera de esta zona se complementó a lo largo del siglo XIX con la existencia de fábricas de alumbre en las localidades de Alloza y Ariño y el desarrollo de un incipiente comercio de exportación del mineral; aunque, la primera concesión minera de cierta entidad fue adquirida, en el año 1916, por el empresario catalán Ricardo Taya quién abrió las minas María y Regina. El despegue del sector minero en la comarca se produjo en el año 1920, en este momento, la Sociedad General Azucarera de España adquirió las concesiones de Taya y abrió la mayoría de las minas de Val de Ariño, como la Mina el Pozo y Corral Negro, para cubrir las necesidades de carbón de sus fábricas en Aragón. Posteriormente, el año 1939 la actividad minera de la zona de Ariño se consolidó al adquirir el control de los yacimientos el grupo SAMCA S.A. Minero Catalano Aragonesa que junto con la llegada, en el año 1942,de ENCASO Empresa Nacional Calvo Sotelo de Combustibles Líquidos y Lubricantes a Andorra propiciaron el ascenso definitivo de este sector en la Comarca. La decadencia del sector en Teruel, y en concreto en esta zona, se inició en los años setenta con el desarrollo de los combustibles líquidos derivados del petróleo, motivando el cierre de las centrales de Aliaga y Escatrón e implicó el cierre de algunas minas como Mina Se Verá de Escucha. Sin embargo, la puesta en funcionamiento de otra central térmica, en este caso en Andorra, contribuyó a superar esta situación. Fue en este momento, cuando una nueva empresa inició su actividad en la comarca, se trataba de ENDESA que sustituyó a ENCASO y que tuvo como principal objetivo la producción de energía eléctrica mediante la puesta en marcha de la central de Andorra en 1981. Tradicionalmente, la minera de Val de Ariño era subterránea, sin embargo, la demanda de lignito por parte de la central de Andorra obligó a iniciar las explotaciones a cielo abierto para satisfacerla. SAMCA abrió la primera corta en el año 1975 mientras que ENDESA explotó en la Val de Ariño las denominadas Corta Alloza y Corta Barrabasa. De todo el Patrimonio minero que ha conservado la comarca, las localidades de Andorra y Ariño concentran el conjunto más amplio ya que a las minas con todos sus elementos auxiliares como pozos con castilletes, enganches, casa de máquinas y tolvas, lavaderos, escombreras, vestuarios, almacenes, talleres, pozos de ventilación y edificios para la turbina, entre otros que se encuentran en sus términos municipales hay que añadir la construcción de los poblados mineros llevada a cabo por las propias empresas dentro de una concepción paternalista de acción empresarial heredada del siglo XIX.
Verano: Fines de semana y Festivos: 11:00 a 14:00 h y 17:00 a 20:00 h Invierno: Fines de semana y Festivos: 12:00 a 14:00 h y 16:00 a 17:30 h Concretar visitas: 978 880927 / 978 843853. Cerrado: Enero y segunda quincena de Diciembre. Consultar horarios.
