Es el único testimonio que queda en Aragón de la primera generación de cementos que se levantaron en los años veinte y contribuyeron a su despegue económico.
El sector de la construcción fue uno de los más destacados en las primeras décadas del siglo XX en Aragón, favorecido por el aumento de la edificación de viviendas y el impulso de las obras públicas con la creación de la Confederación Sindical Hidrológica del Ebro en 1926. Esto se tradujo en la creación de sociedades urbanizadoras y de construcción, de concesionarias de obras públicas y en la instalación de dos fábricas de cemento Portland: una en Zaragoza, en el barrio de Miraflores 1928 y otra en Morata de Jalón 1930 . La fábrica de Morata elaboraba cemento Portland artificial a partir de aprovechamiento de los yacimientos carbonatados existentes en las cercanías de la localidad. Su construcción fue autorizada en junio de 1929 con una capacidad de 60.000 Tm/año por el sistema de vía húmeda y la maquinaria se contrató con la empresa alemana Krupp. Se puso en marcha en 1932 y sus instalaciones estaban formadas por una trituradora primaria de doble rotor, un molino tubular, un horno de clinker con enfriador de satélites, un molino tubular de cemento, tres silos para almacenamiento de cemento y una ensacadora fija. A lo largo de su historia y hasta nuestros días la empresa se ha mantenido abierta gracias a una constante renovación de sus instalaciones. La renovación tecnológica ha sido una constante. En la actualidad, cuenta con una cantera de la que se extrae marga y caliza, con una trituradora primaria y tres naves de almacenamiento y prehomogeneización sistema FLS, dos molinos para la molienda del crudo y cuatro silos de almacenamiento y homogeneización continua sistema CP con enfriador de satélites, dos hornos para la clinkerización y un almacén de clinker, dos molinos para la molienda del cemento y siete silos de almacenamiento , además de otras instalaciones.
Empresa en activo. No tiene visita.
